La importancia de una buena nutrición
Las personas necesitan estar bien nutridas para evitar enfermedades, estar saludables y alcanzar su máximo potencial.Mejorar la nutrición conduce a sistemas inmunológicos más fuertes, embarazos más seguros, menor riesgo de enfermedades no transmisibles (como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares) y una vida más larga. Los niños sanos aprenden mejor y los adultos bien nutridos son más productivos. Mejorar la nutrición puede romper los ciclos de pobreza y hambre entre generaciones1. Al mismo tiempo, la aceleración del cambio climático, el uso de la violencia para resolver conflictos, el aumento del costo de vida y la pandemia de COVID-19 han sacudido los sistemas alimentarios y financieros, lo que ha resultado en un aumento del número de personas malnutridas. Las mujeres y los niños están especialmente en riesgo2.
A nivel mundial, 2,33 mil millones de personas (o el 29 por ciento de la población de nuestro planeta) no tuvieron acceso constante a alimentos nutritivos, seguros y suficientes. Entre los niños menores de cinco años, se estima que 148,1 millones (22,3 por ciento) tenían retraso en el crecimiento (demasiado bajos para su edad), 45 millones (6,8 por ciento) tenían emaciación (demasiado delgados para su edad) y 37 millones (5,6 por ciento) tenían sobrepeso3. El mundo no está en camino de alcanzar los objetivos globales de nutrición de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para 2030. La malnutrición es una gran carga para las personas y las sociedades. Los impactos en el desarrollo, económico, social y médico de la malnutrición son serios y duraderos, para los individuos y sus familias, para las comunidades y para los países4.